Eusebia Palomino Yenes, FMA, vio la luz en el crepúsculo del siglo XIX – el 15 de diciembre de 1899 – en Cantalpino, pequeño pueblo de la provincia de Salamanca (España) en una familia tan rica de fe como escasa de medios económicos.
A los doce años va a Salamanca con su hermana mayor y se pone a servir como niñera.
Los domingos por la tarde va al oratorio festivo de las Hijas de Maria Auxiliadora, allí conoce a las hermanas, que deciden pedirle su colaboración para ayudar a la comunidad. Eusebia acepta con mucho gusto y enseguida se pone manos a la obra: ayuda en la cocina, acarrea la leña, ayuda en la limpieza de la casa, tiende la ropa en el patio grande, va a acompañar al grupo de las estudiantes a la escuela estatal y hace los mandados en la ciudad.
El deseo secreto de Eusebia, de consagrarse por entero al Señor, enciende y nutre cada vez más sus actos y su oración. Dice: «Si cumplo con diligencia mis deberes tendré contenta a la Virgen Maria y podré un día ser su hija en el Instituto». No se atreve a pedirlo, por su pobreza y falta de instrucción, no se cree digna de tal gracia: porque piensa, ¡es una congregación tan grande!.
La Superiora visitadora, con la que ella se confía, la acoge con bondad materna y le asegura: «No te preocupes de nada» y con gusto decide admitirla en nombre de la Madre General.
El 5 de Agosto empieza el Noviciado en preparación a la profesión. Después de dos años – 1924 – se consagra totalmente al Señor con los votos religiosos que la vinculan mucho más a él.
Todo en Sor Eusebia, refleja el amor de Dios y el fuerte deseo de hacerlo amar. Sus jornadas de trabajo son una transparencia continua y lo confirman sus temas predilectos de conversación: el amor de Jesús a todos los hombres que ha salvado con su Pasión.
En Valverde del Camino (Huelva), y tras varios años de enfermedad, Sor Eusebia fallece en el corazón de la noche entre el 9 y el 10 de febrero de 1935. Fue beatificada por Juan Pablo II el 25 de abril de 2004.
En esta web te ofrecemos algunos materiales para conocer mejor su vida, su espiritualidad, su historia como Hija de María Auxiliadora que vive la santidad en la sencillez de cada día. También te presentamos el Proyecto Cantalpino, y cómo puedes colaborar en él. Se trata de un proyecto encaminado a recuperar y habilitar espacios alrededor de la casa natal de Sor Eusebia, ampliando las instalaciones para acoger a peregrinos y grupos que se acercan allí para conocer a Sor Eusebia.